17 Feb Cómo dejar de tener pensamientos obsesivos
En la consulta de psicología a menudo el motivo de consulta es la necesidad de que los pensamientos nos dejen descansar. Las personas con pensamientos obsesivos, reconocen lo intrusivo en innecesarios de su mecanismo repetitivo, pero la necesidad de certeza, de buscar la respuesta que le alivie forma parte de nuestros impulsos emocionales (casi como la curiosidad y la inquietud por descubrir, la sed de saber), desde este mecanismo con origen arcaico vestido de la elegancia de la capacidad de razonamiento, justo los mecanismos de planificación y regulación del cortes fracasan continuamente, tratando de gestionar los pensamientos desde la razón, cuando son temores emocionales que se manifiestan en forma de pensamientos obsesivos.
Ansiedad y pensamientos obsesivos
Los pensamientos obsesivos están directamente relacionados como desencadenantes de ansiedad, la neurociencia aporta información contrastada sobre las reacciones cerebrales según la interpretación de la amenaza; en un principio el mecanismo del miedo se activa por canales psicofísicos a través de los sentidos y se activa la amígdala y las zonas relacionadas, a nivel de estructuras subcorticales, es un miedo implicado en la supervivencia, cuando la amenaza se alimenta de supuestos, de posibles escenarios de riesgo, que se originan en la corteza cerebral, entonces aparece el pánico.
El planteamiento parece decir que pensar nos perjudica, en los casos de pensamientos rumiantes, la cadena de intentos de control llevan precisamente a lo contrario de lo que se busca, tan sólo en pequeñas ocasiones, su planteamiento de solución han dado resultados positivos temporales, el mecanismo no se para ante ese querido fin, busca otra diana de preocupación y obsesión. Luego, aquello por lo que se preocupa es solo una manifestación de la estructura de preocupación, en el fondo lo que se trata de conseguir es un control que otorgue la paz que se busca.
“El resultado es el contrario, el control conduce al descontrol”
Pensamientos obsesivos y repetitivos
Los pensamientos obsesivos y repetitivos, todas las alternativas, las dudas, las necesidades de confirmaciones externas… queda en un mar lleno de preguntas a las que no se les da una respuesta contundente, sólo refuerza la sensación de inseguridad. Se crea todo un laberinto con difícil salida y se mantiene el neuroticismo.
Podemos tratar de trabajar esos pensamientos con la intención de que desaparezca o al menos bajen de intensidad, a través del bloqueo, rechazando racionalmente querer pensar en ellos. Lo que sucede es que pensar en no pensar, es pensar. El esfuerzo y lo obsesivo sigue estando presente. La tranquilidad mental que se quiere conseguir se mantiene en la trampa, las complicaciones son infinitas.
El malestar de los pensamientos obsesivos es la respuesta de cuestiones irresolubles que se tratan de contestar mediante criterios racionales.
Los pensamientos obsesivos se basan en buscar respuestas correctas a preguntas incorrectas.
Eliminar los pensamientos obsesivos
Para eliminar los pensamientos obsesivos el enfoque de solving estratégico plantea que trabajar la dinámica de la duda incide en no crear preguntas que no solucionan el fondo del malestar, pues el proceso de pensamiento seguirá con otras temáticas que vayan surgiendo.
Las respuestas que quedan sin solucionar la verdadera inquietud se resuelve cuando lo que se modifica es la búsqueda de la certeza a través de los pensamientos obsesivos.
La misma resistencia al sufrimiento mantiene el malestar, del mismo modo dejar de luchar por los pensamientos es la estrategia para acabar disolviendo la obsesión. “Poniendo en discusión la corrección de las preguntas puede bloquearse el círculo vicioso de la búsqueda de respuestas correctas a preguntas incorrectas”.
Saber preguntarse solo aquello que se puede responder es el mejor aprendizaje para alejar las dudas y las obsesiones.